El quiebre del Frente Progresista y sus consecuencias

El Frente Progresista como tal se perfila a no ser el mismo en los próximos tiempos, en realidad volverá a sufrir un nuevo cambio u otra fuga de integrantes, en este caso una gran parte de radicales, que con otras aspiraciones buscan armar un frente más amplio.

Hace varias semanas que venimos contando desde aquí que otro sector del radicalismo deja el Frente Progresista. Se van de la coalición que supo gobernar la Provincia de Santa Fe durante 12 años. Abandonan una coalición que dio sus frutos desde lo electoral con la expectativa de crear un frente amplio, que aglutine a todas las fuerzas que no coincidan con el Kirchnerismo nacional.

Primero recordar que hubo un sector de radicales encabezados por Mario Barletta y José Corral, que fueron los primeros en irse del Frente Progresista para asociarse a “Cambiemos”, ahora convertido en “Juntos por el “Cambio”. Ahora, son los “NEO” referenciados en Maximiliano Pullaro, Felipe Michlig y Carlos Fascendini, junto con los “LIBRES” encabezados por Lisandro Enrico. Estos últimos, por ahora solo negocian los términos de la conformación de una nueva alianza electoral que incluya a los sectores del macrismo y tratan de converse al Socialismo.

Los radicales hasta el momento no tienen éxito. La gran mayoría de los partidos aliados al Frente Progresista, de alguna u otra manera ya han planteado una negativa a formar una alianza con lo que consideran que son la derecha democrática Argentina: el PRO. A esto debemos sumarle, que en los próximos días comenzaran a escucharse expresiones de grupos de radicales que tampoco estarían de acuerdo con esta idea.

Ahora bien, lo que vamos analizar son las consecuencias desde un lado y otro de esta idea de un Frente Amplio. En primer lugar, debemos recordar que en este medio ya hemos contado que el silencio del ex Gobernador Miguel Lifschitz, habla por sí solo. Hay un dicho que dice, “hay silencios que aturden” y eso es lo que está pasando en este caso.

Más allá de que Lifschitz, no hable, hay otros que lo hacen por él. Y un ejemplo es el del actual Diputado Nacional y Presidente Provincial del Partido Socialista Enrique Estévez, que indico hace unos días: “El FPCyS no es solo un frente electoral, es un frente de gobierno conformado por partidos políticos y mov sociales que compartimos ideas, valores y un programa de gobierno. Con gestiones transformadoras que promueven la solidaridad, la participación y la transparencia”.

El legislador nacional además manifestó en su Twitter: “Nacimos para cambiar la realidad de nuestra provincia sin viejas recetas y sin atajos. El FPCyS es una propuesta superadora a una grieta que no ha podido encontrar un rumbo para nuestro país en la última década”, agregando para completar su mensaje: “El actual Gobierno de Santa Fe es la muestra de una propuesta conformada solo para una coyuntura electoral y que hoy lleva dos meses sin Ministro de Gobierno. El FPCyS debe sumar con una mirada de futuro común. Cambiar la realidad es algo mucho más complejo que ganar una elección”. Con estas declaraciones está más que claro lo que piensa, al menos una parte, del Socialismo.

Pero hubo otra expresión Socialista que fue la del ex Diputado Nacional Juan Carlos Zabalza, quien rechazo las declaraciones del Secretario General del PRO Nacional y miembro del gabinete de Horacio Rodríguez Larreta en la ciudad de Buenos Aires Eduardo Macchiavelli, quien manifestó: “Con el Socialismo tenemos los mismos postulados en CABA, Rosario y la Provincia de Santa Fe”.

Zabalza, quien en la actualidad es asesor de legisladores Socialista, expreso sobre las declaraciones de Macchiavelli: “Lamentable. Después de dejar Argentina peor de cómo la recibieron pretenden dar cátedra en Santa Fe. El socialismo ratifica su construcción de un frente que avance en políticas públicas igualitarias, mejor democracia y más transparencia, ajeno al PRO, Esa es la posición de @ps_argentina”

A las expresiones Socialista debemos agregarles las ya vertidas y citadas en este medio del referente del CREO Ariel Bermúdez o del GEN referenciado en Mónica Peralta, sin olvidarnos de la confirmación de Alicia Gutiérrez, del Partido SI, indicando que siempre para su sector el límite para una alianza fue Cambiemos.

Mientras los radicales ven cada vez más frustradas sus ideas de un gran frente electoral antikircheneristas, con estas expresiones que cada vez son más, por lo bajo juegan dos cartas muy fuertes. Una que dice: “Quedarnos en el medio de una polarización inevitable nos pone como simples espectadores, teniendo electoralmente una participación testimonial y eso no queremos”. Por otra parte, off the record anticipan que: “si los Socialistas no se suman a este Frente Amplio, iremos por la presidencia en la Cámara de Diputados de Santa Fe”. Otra expresión popular dice: “el que avisa no traiciona” y eso es lo que manifiestan a micrófono cerrado algunos radicales.

Aunque la novela de verano está en pleno proceso, las reuniones y charlas cada vez son más intensas, las consecuencias del quiebre del Frente Progresista no serían solo electorales, también serían estructurales. En todos los casos la ganancia será toda para el peronismo, ya sea el Nacional o el Santafesino.

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